Flora nativa en los jardines: Vegetación local para zonas sombrías y húmedas

Fuente de inspiración para un estilo silvestre, pero a la vez delicado. Las especies nativas aportan colores sutiles y son un oasis para aves e insectos. Su mantención es sencilla y, si las ponemos en el lugar adecuado, su cultivo no requiere mayores esfuerzos porque están adaptadas a las condiciones del lugar. Además, y no menos importante, su incorporación a nuestros jardínes es un aporte relevante para la conservación y el cuidado del ecosistema local. ¡Qué mejor!

 

Sin duda alguna los espacios verdes con especies nativas tienen mucho que entregar. Pueden combinarse perfectamente con otras plantas que nos gusten o ya tengamos en el jardín, pero ir incorporando poco a poco especies autóctonas es en definitiva un gran aporte. Acá te contamos algunos tips para plantarlas y mantenerlas en aquellos lugares del jardín más húmedos y sombríos. Si quieres saber más sobre especies para zonas soleadas o algunos árboles nativos mira nuestros artículos anteriores!

 

Acercamiento de flor de calle calle (Libertia chilensis). Flor presente en un jardín de Santiago. Proyecto Queule Paisajismo. Foto: Luciano Benetti.

Zonas sombrías y húmedas

Es posible encontrar ciertos lugares en los que la luminosidad es baja y la evaporación de agua está limitada por la falta de radiación. Esto suele darse por la existencia de árboles con copa ancha o por la presencia de casas y edificios aledaños que generan sombra. En estos casos, las condiciones ambientales son más húmedas y frías, por lo que se puede considerar incluir especies de zonas más boscosas o sureñas.

Calle calle (Libertia chilensis) junto a especies exóticas en un jardín de Santiago. Proyecto Queule Paisajismo. Foto: Luciano Benetti.
  • Arbustos para macizos

Escallonia (Escallonia rubra): Arbusto siempre verde que posee pequeñas y delicadas flores con forma de campana de tonalidades rosadas y rojas. Se planta a pleno sol o en semi sombra y requiere un riego intermedio que mantenga el sustrato siempre húmedo. Posee una floración extendida que atrae variadas especies polinizadoras. Se poda para dar forma y controlar su crecimiento y puede ser plantada en macetas y jardineras. Es una buena opción para formar setos, o bien puede ser combinada con otros arbustos y flores en macizos. 

 

Chilco rojo (Fuchsia magellanica): Arbusto perenne muy utilizado en paisajismo. Se planta a semi sombra y requiere riego medio/alto. Tiene una floración especialmente atractiva y abundante, la cual atrae picaflores. Se puede utilizar para dar forma y color a los jardines, sobresaliendo su follaje y flores cerca de cursos de agua. Luce bien en conjunto con las flores blancas de Calle calles y Arrayanes. Es posible cultivar este arbusto en macetas o jardineras. ¡Nos encanta!

 

Chilco rojo (Fuchsia magellanica). Foto: Gabriela Matamala.

Ribes (Ribes trilobum):  Arbusto de mediana altura que se planta a semi sombra y requiere un riego medio. Posee un bello follaje color verde claro y una floración en racimos amarillos. Se puede combinar con otros arbustos o en macizos aprovechando la atractiva caída de sus flores y hojas. Soporta las podas y puede ser plantado en macetas y jardineras. 

 

Corcolén (Azara serrata): Arbusto alto que se planta a sombra parcial o sombra y requiere riego medio/alto. En primavera posee una hermosa y abundante floración amarilla, la cual atrae abejas nativas! Se puede utilizar como pequeño árbol solitario, en bordes de camino o para dar altura y color a macizos.

 

Chilcos (Fuchsia magellanica), Calle calles (Libertia chilensis) y Arrayanes (Luma apiculata) en un jardín de Santiago. Proyecto Queule Paisajismo. Foto: Luciano Benetti.
  • Flores para dar color

Calle Calle (Libertia chilensis): Geófita ampliamente usada en paisajismo. Se planta en semi sombra y requiere un riego medio. Posee una hermosa y elegante floración prolongada, que se manifiesta en delicadas varas florales blancas. Se recomienda combinar con arbustos de follaje verde y compacto, como también con otras flores de tonalidades rojas, como Geum magellanicum. 

 

Vara de marmol (Francoa appiculata): Herbácea persistente que se planta a semisombra o sombra y que requiere riego medio. Resaltan sus hermosas varas florales de color rosado pálido, las cuales pueden adornar zonas húmedas del jardín. Una vez finalizada la floración se deben cortar las varas florales secas y las hojas muertas.

 

Vara de mármol (Francoa appendiculata) con la flor en formación. Proyecto Queule Paisajismo. Foto: Luciano Benetti. 

Geum rojo (Geum magellanicum): Herbácea persistente que se planta a semi sombra y tiene un requerimiento hídrico medio, con mantenimiento del sustrato húmedo constantemente. Posee unas atractivas flores de color rojo anaranjado que pueden ser plantadas en grandes cantidades para aportar manchones de color al jardín. Se le deben aplicar podas de limpieza para eliminar las hojas muertas. 

 

Geum rojo (Geum magellanicum) en conjunto a otras especies exóticas en un jardín de Santiago. Proyecto Queule Paisajismo. Foto: Luciano Benetti.
  • Cubresuelos

Cotula (Leptinella scariosa): Planta tapizante que se planta a pleno sol o sombra parcial y que requiere riego medio. Es ideal para reemplazar en césped ya que tiene rápida cobertura, resiste bien las podas y llega a crecer hasta 10 cm de altura. En primavera y verano posee una pequeña floración de color blanco.

 

Cotula (Leptinella scariosa) utilizada como tapizante en un jardín costero. Proyecto Queule Paisajismo. Foto: Paola Meniconi.
  • Trepadoras 

Voqui (Cissus striata): Trepadora siempre verde que se planta a semi sombra y requiere riego medio. Necesita alguna guía para trepar y sirve para cubrir muros o rejas. Resaltan especialmente sus hojas de color verde claro y sus pequeños frutos que cambian de color. Se le pueden aplicar podas para controlar su crecimiento. 

 

Voqui (Cissus striata) en un cerco de un jardín de la precordillera de Santiago. Foto: Gabriela Matamala.

Estas son sólo algunas de las muchas especies nativas que podemos utilizar en nuestros jardines. La invitación es a conocerlas, incluirlas y aprender de nuestro patrimonio local. Esperamos que te sirvan estos tips y recomendaciones, y si tienes dudas extra o si quieres saber más sobre como incorporar especies nativas en nuestros jardines no dudes en escribirnos a queulepaisajismo@gmail.com.

Nota: Todas las fotos de este artículo son de proyectos que hemos diseñado y ejecutado en Queule Paisajismo. Las recomendaciones de cuidados y mantención de la flora local las hemos recopilado de los conocimientos de las connotadas científicas Paulina Riedemann y Adriana Hoffman, como también de nuestras experiencias con los jardines nativos que hemos implementado.